El euro “ataca” más fuerte que el dólar. Se cotizó a $1,50 el miércoles, su máximo en 14 meses
Texto: Sirlene Araujo Díaz
Países emergentes desean reemplazar al billete verde. Expertos no lo ven viable. Sugieren una cesta monetaria. La “guerra” monetaria comenzó y se vislumbra que será para largo. El euro cada vez luce más fuerte que el dólar —el miércoles se cotizó en $1,50, el máximo en 14 meses— lo que ofrecería la plataforma para ir reemplazando, en un futuro, al billete verde en las operaciones internacionales. El debate sobre un cambio de moneda en las transacciones de materias primas se reavivó luego de que un periódico británico asegurara, la semana pasada, que China, Japón, Rusia y Francia estaban manteniendo conversaciones secretas con los Estados del Golfo Árabe para sustituir el dólar en la comercialización de petróleo por una cesta de monedas en un período de nueve años, que incluiría al yen japonés, al yuan chino, al euro, al oro y a una nueva divisa para las naciones del Consejo de Cooperación del Golfo. Estas afirmaciones fueron desmentidas luego por los gobiernos respectivos. Incluso, el secretario general de la Opep, Abdullah al-Badri afirmó el miércoles pasado que desconocía los planes para un cambio de moneda. Sin embargo, Rusia e India acordaron ayer estudiar la posibilidad de usar sus divisas nacionales en el comercio bilateral, según el banco central ruso. Estos países emergentes seguirán el ejemplo de Bolivia y Venezuela que emplearán el sucre —sistema monetario creado por el Alba la semana pasada en su VII cumbre, en Bolivia— como divisa de intercambio entre ambos países. Pese a que el euro gana fuerza con respecto al dólar, a los europeos no les agrada para nada la idea, pues una moneda fuerte trae consigo encarecimiento de sus exportaciones cuando comienza a verse una reactivación económica en la zona euro. Tampoco China ve con buenos ojos la depreciación del “verde”, ya que el gigante asiático posee 2,27 billones de dólares en reservas de divisas en esta moneda, las mayores del mundo; mientras que las de Japón son las segundas, con 1,05 billones. Pero, Estados Unidos no se disgusta en lo absoluto por lo que está pasando con su moneda, porque al final el es el gran beneficiado. La fragilidad del dólar favorece sus exportaciones, aunque sus funcionarios lo nieguen públicamente. Un posible reemplazo del dólar en las transacciones comerciales en estos momentos, no es conveniente, según el analista financiero, José Grasso Vecchio, quien tampoco considera idóneo sustituir al dólar por el euro, ya que se estaría gestando otro mercado especulativo. “Creo que lo más conveniente es tener una diversificación de monedas, en la que se tenga las reservas internacionales tanto en dólares como en euros, ya que históricamente lo que viene ocurriendo es que cuando el dólar baja el euro sube o viceversa”. Grasso Vecchio reiteró que “lo más inteligente es tener una cesta de monedas donde haya un equilibrio, lo que daría una mayor protección, al no tener una dependencia con una sola moneda. Ésto es algo que se ha debido hacer desde hace mucho tiempo. La cesta de monedas es lo más conveniente y factible”. El economista Jesús Faría también coincide con Grasso, al apuntar que llegó la hora de cambiar el patrón monetario del dólar en el mercado petrolero por un conjunto de monedas. “El dólar experimenta muchas fluctuaciones que se transmiten en el mercado energético lo que genera volatilidad”. Faría aseguró que el planteamiento de una cesta de monedas depende de la voluntad política de los países del mundo. “La condiciones económicas y financieras están dadas debido a la crisis financiera que es una crisis del dólar. Pero, la voluntad política no existe. Hay países que están presionando; pero no con la fuerza que se necesita. Las realidades obligarán a los países a tomar esa decisión”. Decisión, que a juicio del economista criollo Alexander Guerrero no es tan fácil, pues “acabar con el dólar como moneda de pago internacional es más un anhelo político que una necesidad desde el punto de vista económico y financiero”. “Para llevar a cabo una cesta de moneda, el mercado que está importando debe comprar desde China para usar su divisa o de Europa para utilizar su moneda. El 40% de los bienes y servicios que se producen en el mundo se exportan a los Estados Unidos que paga con dólares y es uno de los principales consumidores mundiales”. El debate de una canasta monetaria está en la palestra hoy más que nunca por efecto de la crisis. Ir a otro sistema cambiario llegará tarde o temprano; mientras tanto la guerra de las monedas continuará en el vaivén de los “ataques” especulativos.
http://www.panorama.com.ve/
http://www.panorama.com.ve/
No hay comentarios:
Publicar un comentario